Cómo acelerar el arranque de tu PC con Windows 11

Windows 11 es bastante elegante, sin duda, pero cualquiera que lo haya usado lo suficiente sabe que los tiempos de arranque pueden ser muy variables. A veces es rapidísimo, otras veces da la sensación de que se arrastra durante minutos. Normalmente, se debe a una combinación de cargas en segundo plano, fallos en los controladores o limitaciones de hardware, especialmente en equipos antiguos con discos duros. Quien diseñó Windows, por supuesto, tuvo que complicar las cosas un poco más de lo necesario. En cualquier caso, si tu PC se siente lento desde el principio, hay varios trucos y ajustes que pueden ayudarte a acelerar el proceso sin tener que reinstalarlo todo o actualizar el hardware de inmediato. Conocerlos puede reducir drásticamente los tiempos de arranque, y normalmente solo es cuestión de ajustar algunas configuraciones o gestionar mejor los programas de inicio.

🎯 Cómo acelerar el tiempo de arranque de Windows 11

Método 1: Deshabilitar programas de inicio innecesarios

¿Alguna vez te has preguntado por qué tu PC tarda tanto en mostrar el escritorio? Probablemente se deba a que se carga con decenas de aplicaciones nada más encenderse.¿Cosas como Skype, Dropbox, Spotify o esas aplicaciones en la nube de Adobe? Sí, se cargan al iniciar, consumen muchos recursos y ralentizan el sistema. Esto es especialmente cierto si todavía usas un disco duro, el cargador lento del mundo informático.

Deshabilitar elementos de inicio innecesarios es una de las mejoras de velocidad más notables. Esto ayuda a que tu PC se concentre solo en lo necesario durante el arranque, sin bloatware que la ralentice.

Cómo deshabilitar aplicaciones de inicio en Windows 11

  • Presione Ctrl + Shift + Escpara abrir el Administrador de tareas.
  • Haga clic en la pestaña Inicio.
  • Revisa la lista para encontrar aplicaciones que no necesitas iniciar de inmediato, como Steam, Skype o los iconos de actualización. Haz clic derecho en ellas y selecciona Desactivar.
  • Probablemente verás el impacto de Inicio “Medio” o “Alto” ​​para guiar tus elecciones.

En algunas configuraciones, esto puede reducir el tiempo de arranque en al menos un 30 %, incluso más si varias aplicaciones pesadas compiten por los recursos. Recuerda: ¿algunas aplicaciones esenciales, como el antivirus o las herramientas de sincronización en la nube, deben estar activadas?

Método 2: Activar el inicio rápido

Esta es una función integrada que lleva tiempo disponible, pero que a menudo se pasa por alto. Básicamente, es un apagado híbrido: el PC no se apaga por completo, sino que guarda una instantánea de los componentes principales del sistema. Al volver a encenderlo, carga esta instantánea más rápido que si se iniciara desde cero, lo que agiliza considerablemente el proceso.

Pasos para habilitar el inicio rápido en Windows 11

  • Abra el Panel de control ( Win + S, luego escriba “Panel de control”).
  • Vaya a Hardware y sonido > Opciones de energía.
  • Haga clic en Elegir la función de los botones de encendido.
  • Haga clic en Cambiar configuraciones que actualmente no están disponibles (cerca de la parte superior).
  • Desplácese hacia abajo hasta Configuración de apagado y marque Activar inicio rápido.
  • Pulse Guardar cambios.

Esto es especialmente útil en sistemas con disco duro: el arranque puede tardar de un minuto a tan solo 10-15 segundos. Pero cuidado: si usas Linux con arranque dual, el inicio rápido podría causar problemas de acceso a archivos compartidos. No sé por qué funciona, pero vale la pena probarlo.

Método 3: Mantenga Windows y los controladores actualizados

A veces, los arranques lentos se deben a errores, incompatibilidades o controladores obsoletos. Las actualizaciones de Windows suelen incluir parches de rendimiento, no solo correcciones de seguridad. Busque actualizaciones regularmente, especialmente después de las principales versiones de Windows o de las actualizaciones de controladores del fabricante de su PC.

Cómo actualizar Windows y los controladores

  • Presione Win + Ipara abrir Configuración.
  • Vaya a la sección Actualización de Windows.
  • Haz clic en Buscar actualizaciones. Instala las actualizaciones pendientes y reinicia.

Lo mismo ocurre con los controladores: pulsa Win + X y selecciona Administrador de dispositivos. Expande categorías como Adaptadores de pantalla o Controladores de almacenamiento, haz clic derecho en Dispositivos y selecciona Actualizar controlador > Buscar controladores automáticamente. A veces, estas actualizaciones mejoran notablemente la velocidad de arranque, sobre todo si tu hardware se bloqueaba con firmware o controladores antiguos.

Método 4: usar un SSD y actualizar el hardware

No voy a mentir, las limitaciones de hardware suelen ser la causa de arranques lentos. Los discos duros son más lentos por naturaleza; imagínatelo como esperar en la fila del banco en comparación con escanear artículos con un SSD. Actualizar a un SSD suele ahorrar mucho tiempo, reduciendo el arranque a menos de 20 segundos en la mayoría de los discos modernos.

Si no es posible ahora mismo, al menos desfragmente su disco duro y ejecute «Desfragmentar y optimizar unidades». Busque «Desfragmentar y optimizar unidades» en el menú Inicio, seleccione su unidad y haga clic en «Optimizar». En el caso de las unidades SSD, ejecuta TRIM para mantenerlas rápidas y en buen estado.

Añadir más RAM también puede ser útil, especialmente en PCs antiguas con 4 GB o menos. Más memoria reduce la paginación, lo que se traduce en inicios más rápidos y una multitarea más fluida.

Método 5: Ajustar los efectos visuales y desactivar las animaciones

Windows 11 tiene efectos visuales muy atractivos (transparencia y animaciones) que, si bien son atractivos, pueden ralentizar el arranque en sistemas más débiles. Si prioriza el inicio instantáneo, reducir estos efectos puede ser útil.

Cómo deshabilitar animaciones y efectos

  • Abra Ajustar la apariencia y el rendimiento de Windows (búsquelo o vaya a Configuración > Sistema > Acerca de > Configuración avanzada del sistema ).
  • Seleccione Ajustar para obtener el mejor rendimiento.
  • O desmarque manualmente funciones como Animar ventanas al minimizar o maximizar y Efectos de transparencia.

Sí, es un compromiso, pero si tu PC no da la talla, es una solución rápida para que Windows responda mejor al iniciarse.

🎯 Resumen

En definitiva, acelerar el arranque de Windows 11 no es magia; se trata básicamente de limpieza, administración y un poco de cuidado del hardware. Deshabilitar programas de inicio innecesarios, habilitar el Inicio rápido y mantener el sistema actualizado son pasos sencillos, fáciles de hacer y que pueden marcar la diferencia. Si tu equipo es antiguo o tiene un disco duro lento, actualizarlo a un SSD será la clave. Recuerda: un poco de paciencia y algunos ajustes pueden convertir un PC lento en un demonio de la velocidad.

📝 Lista de verificación rápida

  • Deshabilitar aplicaciones de inicio innecesarias
  • Habilitar inicio rápido
  • Actualizar Windows y controladores
  • Actualice a SSD si es posible
  • Limpiar espacio en disco
  • Desactivar los efectos visuales que no sean necesarios
  • Administrar servicios en segundo plano

Cruzo los dedos para que esto ayude.

Esperemos que estos consejos te permitan una mejora notable en la velocidad. Normalmente, la diferencia reside en combinar la gestión del desorden del inicio con las actualizaciones de hardware. Haz una pequeña limpieza, mantén todo actualizado y dale a tu PC un respiro. Esto debería acelerar el arranque de Windows 11. Mucha suerte, porque, seamos sinceros, a nadie le gusta esperar una eternidad cada vez que enciende el ordenador.

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