Cómo transferir Windows a una nueva unidad: una guía completa paso a paso

Migrar Windows a una nueva unidad puede parecer complicado, pero sinceramente, no es tan complicado si sigues los pasos correctos. El principal problema es evitar perder información importante o un fallo de arranque posterior. La idea es clonar tu sistema Windows actual en una unidad nueva, intercambiar las unidades y ajustar la BIOS para asegurarte de que todo arranque correctamente desde la nueva. Ahorra tiempo si actualizas a una SSD o simplemente quieres empezar de cero con más espacio. La idea es transferir todo (tu sistema operativo, aplicaciones, configuración) sin tener que reinstalar Windows desde cero. Y sí, es bastante práctico cuando funciona sin problemas, aunque en algunas configuraciones puede que necesite algunos ajustes posteriores o un par de reinicios.

Si nunca has clonado una unidad, no te preocupes. La mayoría de las herramientas disponibles, como Macrium Reflect o EaseUS Todo Backup, tienen interfaces bastante sencillas: simplemente vigila las unidades de origen y destino para no borrar accidentalmente la antigua. Siempre es recomendable hacer una copia de seguridad de tus archivos importantes antes de empezar; por si acaso ocurre algo extraño y la clonación no se realiza correctamente, tus datos estarán a salvo. Y sí, necesitarás una forma de conectar la nueva unidad, ya sea mediante cables SATA dentro de tu PC o un adaptador USB a SATA si realizas pruebas fuera de la caja.

Una vez realizada la clonación, lo habitual es apagar el sistema, intercambiar las unidades e iniciar la BIOS para cambiar el orden de arranque. A veces, querrás acceder a la BIOS pulsando F2, F10 o Supr durante el arranque (depende de tu placa base).Configurar la nueva unidad como dispositivo de arranque principal suele ser simplemente navegar al menú Orden de arranque. Después, guarda los cambios y sal. Tu PC arrancará desde la nueva unidad y listo: has migrado el sistema sin necesidad de una nueva instalación. Claro que la BIOS debe estar bien configurada, y a veces Windows puede resultar un poco confuso tras cambiar de unidad (como de HDD a SSD), pero reinstalar no siempre es necesario si la clonación se realiza correctamente.

Si el sistema no arranca después, podría deberse a un problema de configuración del BIOS o de arranque. Para solucionarlo, podría necesitar entrar en modo de recuperación o usar un medio de instalación de Windows para reparar el inicio. Si Windows no se activa después de la migración, a veces tendrá que reactivarlo a través de su cuenta o activación telefónica, dependiendo de si el cambio de hardware activó la desactivación.

Otro aspecto a tener en cuenta: algunas herramientas de clonación pueden crear un clon arrancable que requiere una reparación o reconfiguración rápida. En ciertas configuraciones, el primer arranque desde la nueva unidad puede ser un poco lento o inestable, probablemente porque Windows se está ajustando durante la primera ejecución. Así que, tenga paciencia si no arranca a la perfección de inmediato.

Si esto no solucionó el problema, esto podría ser útil: revisa la configuración de tu BIOS, especialmente el modo UEFI/Legacy y las opciones de Arranque seguro. A veces, Windows se instala en modo UEFI, y tu BIOS debe coincidir con esa configuración para que la nueva unidad arranque correctamente. Además, si la clonación se realizó en una configuración de hardware diferente o con un tipo de unidad diferente, podrías necesitar realizar una reparación rápida del sistema con una unidad de recuperación de Windows o la reparación de inicio integrada.

Y luego… no olvides actualizar los controladores de disco o de la controladora de almacenamiento mediante el Administrador de dispositivos si Windows no reconoce la nueva unidad correctamente después de la migración. A veces, simplemente es cuestión de que Windows necesite un pequeño empujón para que reconozca el nuevo hardware correctamente, especialmente si cambiaste de un disco duro giratorio a un SSD NVMe nuevo y reluciente.

Ojalá esto le ahorre algunas horas de frustración a alguien. Solo recuerda: primero haz una copia de seguridad, clona, ​​intercambia las unidades con cuidado, ajusta la BIOS si es necesario y arranca. En una máquina todo salió bien, en otra necesitó una pequeña reparación de Windows, pero en general, es bastante factible si te mantienes tranquilo y sigues lo que te conviene.¡Mucha suerte!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *